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¡LÉELO Y DECIDE!


Podrán decirte de un libro que es malo, o que es bueno, pero, no tendrás certeza de lo uno ni lo otro hasta que no lo constates tú mismo. ¡Léelo y decide!

Cuando iniciamos la etapa escolar, los objetivos primarios perseguidos por las instituciones y que han sido planteados según los cánones socialmente establecidos, son que aprendamos a leer y escribir; y ¡lo logran!, si lo consideramos en términos de comunicación (decir y escuchar por escrito). Posteriormente, en nuestra edad adulta; determinadas áreas o carreras pretenden enseñarnos a leer y escribir “correctamente”; y ¡casi lo logran!, analizándolo desde el enfoque de la gramática y el adecuado uso del lenguaje que esta promueve. No obstante, y dado que no habrá cátedra alguna que pueda enseñar a sentir o trasmitir sentimientos (pues es algo inherente a cada ser), saltando los aspectos estilísticos y narrativos, no puede afirmarse que una obra literaria sea buena o mala en esencia.

Si te dicen que tal o cual libro es bueno, ¡no les creas!; y si te digo que alguno de mis escritos lo es, ¡duda de inmediato!; yo podría ser el más mentiroso de todos, el más inexperto o el más ingenuo.

Sin embargo; no relegues un libro porque alguien te dijo que era malo, ni reniegues de él, si tras haberlo leído no logró tu simpatía; date la oportunidad de equivocarte, que al final; sin duda alguna y por insignificante que parezca, te habrá dejado algo valioso: Una palabra, una frase, una idea, un verso o una imagen, un sentimiento, una inquietud o un anhelo.

¡Había una vez un libro malo que cayó en manos de un lector corriente y se volvió bueno!


Hubo una vez un libro bueno, pero en manos de un crítico se sintió tan malo, que decidió convertirse en papel toilette.

NO GUARDARSE NADA

 

Nadie me persigue

y sin embargo sigo corriendo

ya es cuando para detenerme

ya cuestioné demasiado

creo que necesito un descanso

mental más que físico

pero es que el tanto pensar

de la cabeza hacia abajo

pasando por la espalda

nos agota hasta los pies

de la cabeza hacia arriba

observar conservar  

continuar con calma

acariciar el alba

abrazar el mediodía

saborear el atardecer

regocijarse desde ya

hasta más tarde

no guardarse

de la lluvia de la bruma

de la magia de la aventura

no guardarse

nada en los bolsillos

nada en el corazón

nada del otro

sino es para bien de los dos

no guardarse nada

de lo que puedas dar

la sonrisa al saludar

la palabra que pueda ayudar

el sustantivo amor

el verbo amar

el adjetivo demasiado

no guardarse nada

de lo que puedas compartir

guardarse sí

de no ser útil

de herir de maldecir

no guardarse

la bondad

guardarse sí

de no hacer nada

por ti y por alguien más.


BELLASMÁGICAVILLOSAS FORMAS


¡Despertar sonriendo después de unos buenos días sin este muy grato privilegio y lo genial de ver cómo la mañana sigue mejorando!

Todo aquello y sin mencionar el día que se nos muestra a través de la ventana. Aquí sería maravilloso poner una fotografía, pero ¿y dónde queda aquello de dibujar, retratar con palabras?

... ese estupendo sol tenue que nos brinda un calorcito del que no nos queremos despegar, el cielo cual hoja con viñetas para descubrir en ellas los dulces antojos de nuestra imaginación: elefantes, flores, dinosaurios, algún corazón; voy a mirar y en un momento cuento que más.

... un fantasmita con copete, sonriente él; una familia de tortugas caminando en fila y cual familia de pollitos, mamá tortuga adelante; una mariposa, un mueble, una carta, ojos, narices, sonrisas, pelotas, carritos de juguete, casas, castillos, pocillos; por supuesto, gatitos y perritos, el mismo sol, pero en facsímil y otros tantos y tan maravillosos dibujos que se van borrando y rehaciendo; ¿quién será el artista? Tal vez nosotros, creo que somos nosotros mismos, nosotros solitos y sin ayuda, los que dibujamos trazando bellasmágicavillosas formas con nuestros ojos. ¡Vaya talento!, ¡y quién decía que no sabía dibujar! Mira una vez más o las que quieras, que al fin algo que no tiene precio y sí demasiado valor, como sea; mira una vez más o las veces que quieras, que por eso no hay que pagar, míralo como un regalo de ti para ti. Ahora comparte. Tienes, además de lo anterior, la libertad de contar. ¿Qué otras cosas dibujaste?



¿Qué más has dibujado en el cielo antes o recientemente?
¿Qué ahora?
¡Cuéntanos allí en los comentarios!

UN MEJOR MAÑANA

    

    ¡Claro!, nadie imaginaba que sería este día, pero...

Un mejor mañana por fin era hoy.

Amaneció más temprano.

La mona causó la mejor impresión con su seda.

No hubo beso de Judas

y se escuchó la música del río,

pero sin arrastrar de piedras.

Las buenas noticias

no se hicieron esperar,

aunque estaba larga la fila.

Las contrariedades

se hicieron esperar

aunque no había fila.

De rosa se pintaron

desaires, tristezas, soledades, existencias.

Existencias de vajillas se agotaron

en tiendas y almacenes y supermercados,

pues sin mayor reparo

que las risa propia y ajena.

todos se dispusieron a romper un plato

o dos.

La esperanza decidió que la llamaran certeza

y entonces por fin

la realidad fue más bella

que el más bello sueño

y más intensa.

Y fue ganar por fin

la lotería sin comprarla.

Un mejor mañana por fin era hoy

y con él, la mejor mañana.

Perros y gatos fueron mejores amigos.

Y ya nadie se peleó como perros y gatos

porque el odio y la enemistad terminaron

                                                                enamoraros

                 y se tornó su amor    

                                    aleccionador

        metamórfico

                                                                             sin vuelta atrás.

La estrechez de generosidad           cedió.

El perdón con olvido                       se dio.

La lastimera angustia                       se dio a la fuga.

El irrefrenable tiempo                      se dio a la espera

                           y se quedó por ahí quietecito, sin prisa,

                           solamente contemplando, solo descansando

                                                en el arrullo de la música de la risa.

Y de todos modos

baile y canto al acomodo de todos

de todos modos.

Un mejor mañana por fin era hoy

y con él la mejor mañana.

Se renunciaron a tontos prejuicios

se superaron temores

se vieron a los ojos los indiferentes

y entonces...

Tímidos amores quiméricos

se tornaron valientes

y se encontraron

a la mitad de una naranja. 

Amores inconfesos

salieron del anonimato

y se encontraron

a la mitad del camino,

a la mitad del suspiro,

a la mitad del abismo

y regresaron juntos.

Ninguno quería despedirse

porque ninguno quería irse

y todos coincidieron en que

lo que todos habían anhelado

se había hecho visible

                   palpable

             probable

                     digerible...

Nadie quería evitar a nadie,

ni evitarse a sí mismo

y para embriagarse no hizo falta licor

con la alegría de esta mañana bastó.

Y de todos modos

baile y canto al acomodo de todos

de todos modos.

Un mejor mañana por fin era hoy

y con él la mejor mañana.

Y ya no se hizo tarde

y para colmo de bondades

ella también lo amaba

se lo dijo esta mañana

                                         hace apenas un rato.

 

LA PROFESIÓN MÁS PELIGROSA DEL MUNDO

 

Cuando uno escucha sobre las profesiones más peligrosas del mundo, entre otras, se mencionan algunas como: piloto, doble de películas, bombero, domador de fieras, no, no incluye a algunos esposos, no hoy; otras como minero, ordeñador de serpientes venenosas, ... ojo hoy no se valen esos chistecitos, pues, las suegras son primero que todo madres y las hay excepcionales. Pero, bueno, volviendo a lo de las profesiones más peligrosas, los mineros, claro, también están los que se suben a los postes a reparar las líneas eléctricas de alta tensión, los limpiadores de ventanas de edificios etc. Pero aquí dos paréntesis: uno, que para una madre por sus hijos eso sería como quitarle un pelo a un elefante y el otro, que todos y cada uno de ellos tienen (aquí o en el cielo) madre.

No entiendo como a las aseguradoras de riesgos, no se les ha ocurrido un seguro de vida por ser madre.

Veamos: Reciben la noticia “usted ha sido seleccionada para...” la más abnegada y peligrosa labor. En ese mismo instante comienza su inducción de nueve, ocho, siete meses o incluso menos, pero lo cierto es que, durante ese tiempo, bien podrían participar en un torneo boxístico, no por la agilidad propiamente, sino por la categoría de peso pesado; bueno, ya lo sabemos, tienen que comer por dos, tres y se han dado casos que hasta por siete. Pero volviendo a lo riguroso de su inducción: dolor de pies, de espalda, de cintura, calambres y no hablo del dolor de cabeza, porque ese comienza oficialmente con su primer día de trabajo y sigue con ellas hasta el momento de su jubilación que coincide con el último de sus días, ni uno antes porque salvo casos excepcionales, que no viene al caso mencionar, nunca renuncian, ni son despedidas.

Bueno, el primer día de trabajo, ese primer día del cual ninguna podría negar que es el más doloroso y peligroso de todos sus días hasta ese momento, es también en el que reciben su nombramiento oficial cuando poco después de todo ese dolor, de todo ese riesgo, el milagro, Yo; bueno y todos y cada uno de ustedes también, Así es que si alguno se resiste a creer en los milagros “no tiene madre”.

Prosigamos, tras su nombramiento oficial, todos los días están al borde de un colapso:

De pequeños... ¡Está llorando! Ya, ya, ya shshshshshshs, ¡Ay se cayó! Más grandecitos... será que almorzó, le dolerá algo, ¿cómo me lo tratarán?, ¿cómo me la trataran? ¡Qué no me le coja la noche!, ¡Dios protégemela!, ¡protégemelo! ¡cuídamelos!; y más grandesotes: ¡Qué a ese tal por cual ni se le ocurra gritarme o tratarme mal a la niña!, ¡qué esa tal por cual no se lave el mugre en mi chinito! ... yo sufrí pariéndolos como para que ahora venga otra, otro ¡*! a ultrajármela, ultrájamelo!

Ahora, en el ejercicio de su profesión, en sus labores darías de chef, médico, maestra, por su puesto, contadora de historias, costurera, modista; bueno, aquí otro paréntesis, en esta parte de sus múltiples oficios sí creo que casi todos si pudiéramos las habríamos despedido o sino vean como estaban vestidos en las fotografías de las fechas especiales cuando pequeños; “sí, entendemos que fue con mucho amor, pero que no vuelvan a salir a la luz, por favor”. Para continuar, en sus labores cotidianas también son dietistas, prestamistas, psicólogas, concejeras matrimoniales, abogadas, guardaespaldas y un gran, gran, gran, etc.

En fin, felicitaciones porque por amor a su oficio, su valor y tenacidad es comparable al de quienes tienen las profesiones más peligrosas.

         ¡Se les ama y perdonen lo poquito y lo mal dicho!      


¡PROMETO QUE MAÑANA! >:(

 

“La palabra utopía no debería existir porque no hay nada imposible”

 Juan Andrés a sus 12 o 13 años.

Apuesto a que en no pocas ocasiones te has preguntado qué serías hoy si hubieses tomado tal o cual decisión distinta. Sí, muchos pregonan a los cuatro vientos ser felices con lo que son, pero ¿realmente existe alguien que conozca la plenitud de una palabra que no puede ser un casi, ni mucho menos algo a medias, porque sencillamente no sería eso, sino muchas posibles cosas ajenas al consabido concepto que en nuestros días más grises consideramos utópico.

Pero, “La palabra utopía no debería existir”

De manera que, como no es la felicidad, sino la utopía la palabra que motiva estas y las siguientes líneas...

Solía decirle a mi hijo que podría hacer absolutamente todo lo que se propusiera, si quería volar, pues que volara, que todo estaba al límite de su confianza, de su capacidad de creer; y yo, que pretendía enseñarle algo, terminé aprendiendo.

Mi hijo, que un día “de cuya fecha no puedo acordarme”, mientras íbamos en bus para donde tampoco recuerdo, me creyó; lo supe al escucharle aquellas palabras que aquí hacen las veces de epígrafe y son, aunque me extravié en el camino, el trasfondo.

“La palabra utopía no debería existir porque no hay nada imposible”

 

Hoy, Juan Andrés ya tiene un trabajo y unos objetivos claros, es autónomo y hasta me da lecciones de finanzas, bueno, eso de finanzas quizás es mucho decir, ya que por ahora solamente gana medio mínimo, pero de que lo sabe administrar, lo sabe. No así su padre, que ha perdido la cuenta de muchas cosas y el interés de otras tantas. Pero eso sí, si algo no ha perdido, no del todo por lo menos, es su capacidad de sorprenderse, y esto gracias a que del todo no ha dejado morir su niño interior y continuamente le da tanta libertad que termina actuando como lo haría él, y eso no estaría mal, no del todo, si no fuese porque lo hace en las situaciones menos indicadas, como, por ejemplo, cuando pasa todo un día de un lado para otro haciendo saltar una pelota o como, cuando por las calles recoge una piedrecita y la conduce por las paredes de las casas cual carrito. Sí claro, incluyendo el rum, rum, rum, ruuuuuuuuuuuuuum... Ya imaginarán las caras de los que lo ven, pero les aseguro que aquello no es locura, o por lo menos no una locura insana, es la manifestación de otro niño que tampoco creía en imposibles.    

¡Vaya que me hace quedar mal ese chino verriondo! Yo ya no le pongo mucho cuidado y menos le llamo la atención, lo dejo ser y ya.

La verdad es que eso quisiera, pero no es tan así, no del todo. Sí le permito ciertas licencias como jugar con su amigo imaginario, leer cuentos y poemas que no siempre son para él, también ver los dibujos animados y comer golosinas y, sin embargo, las más de las veces lo asfixio, dejo que se atragante con sus pensamientos y buenas ideas, porque irónicamente, como muchas veces hacemos con nuestros propios hijos, consideramos más importante otras cosas, pues, “son por su bien”, pero que bien les hace que nos pasemos la vida haciendo esas cosas y asegurándoles que pronto tendremos el tiempo para escucharlos y jugar con ellos, hasta que miramos atrás y notamos con cruel desolación que debimos haberlo pensado mejor y dedicarles esos momentos que ni Wells con su máquina nos haría posible recuperar. 

Empero, no podemos olvidar que la palabra utopía no debería existir, porque si la convicción me lo permite podré volar “hasta el infinito y más allá” ¡no!, tampoco, por ahí hasta dónde están mis hijos para que enseñen a su padre a no ser como el cura del dicho que de seguro alguna vez soñó algo distinto para sí. Falta ver si su niño le aprueba la decisión que lo tiene ahora instruyendo a otros en cosas que no es capaz de poner en práctica.

Y yo que aún creo en las palabras de mi hijo surgidas de algo que trataba de enseñarle, he olvidado lo que trataba de enseñarle, o más bien he dejado de creer en ello, bueno, no del todo, es solo un lapsus de días grises.

Pero bueno, me gustaría saber, aunque seguramente no lo sabré, el verdadero tú que anhelaba tu niño o niña interior.

Ahora que, si también tú lo has olvidado, o has dejado de creer en ello por lo que sea que ahora eres, pregunta al niño o la niña que sigue por allí esperando a que le permitas asomarse a través de tus ojos, cantar con voz chillona, saltar un charco, pero con el suficiente atino para caer en la mitad y reír con el rostro enlodado. No le des más largas,  vuelve a ser astronauta, superhéroe o superheroína; conviértete en Goku o la mujer maravilla, y luego, sigue permitiéndole a tu peque interior aparecer de cuando en cuando para que te recuerde que “la palabra utopía no debería existir” y te muestre el verdadero valor de muchas cosas que sí “valían la pena” y costaban tanto menos, o para que al menos, el recuerdo nos regrese aquellas palabras en las cuales sí deberíamos continuar creyendo, como cuando éramos más niños y no con el fervor con que hoy concebimos ciertos e ineludibles tantos supuestos, en pro de lo que será mañana, porque, ¿será mañana? No le des más largas.

De cualquier manera, ya es algo tarde y la semana estuvo agotadora, así que mejor un rato de esparcimiento. ¿Y el niño? ¡Qué no moleste más por ahora porque merezco un descansito!

...



¡No, claro que no!, de ningún modo podría habérseme olvidado todo aquello de lo que venía hablando. ¡Prometo que mañana! >:(


LO MÁS IMPORTANTE ES, UNA MUJER


No estoy dispuesto a creer

que se pueda concebir

LA FELICIDAD

sin una mujer

si lo alcanzaron a descubrir

comencé por mencionar

aquella que es

la más perseguida.

 

Al ver que en sus rostros

aparece LA DUDA

quiero decirles que

también ella es una

y guarda bajo su velo

el conocimiento

que, por cierto

es infructuoso

y puede llegar a ser

muy peligroso

si no tiene una guía

otra insigne mujer

LA SABIDURÍA.

 

¿Importante es o no LA JUSTICIA?

 

¡Lo ven!

Lo más importante

Es una mujer 

Y una mujer es LA FE.

 

Ahora que ya empiezan a comprender 

es momento de agradecer

a una tan especial

que nos ha sido concedida

y sin la cual el dialogo no existiría

a ella debo estas líneas: 

Gracias amada dama

preciosa PALABRA.

 

Paso a mencionar enseguida

a aquella cuya virtud es

jamás ser sometida

preciada mujer

a quien todos

queremos conquistar

bendita sea

LA LIBERTAD


Lo más importante es una mujer

 y tanto así es

que por su encanto

hasta al sol

cuando sale más temprano

o retrasa la hora de ocultarse

es porque espera encontrase una

Su amada mujer es LA LUNA

 

Los más importante es una mujer

esa es LA VERDAD

y la verdad también es una.

 

Y entre otras, qué es lo más importante sino: 

del carácter LA FIRMEZA

del corazón LA PUREZA

ESPERANZA siempre queda

cuando todo nos deja

bondadosa mujer es

la madre NATURALEZA.

 

La VIDA y la MUERTE

también son dos mujeres.

 

Lo más dulce

es LA MIEL

y es también una mujer.

 

Y una mujer también es

LA POESÍA

LA MÚSICA

y LA FILOSOFÍA

LA ARMONÍA

LA BELLEZA

LA LLUVIA

y LA TERNURA

LA PASIÓN

LA ILUSIÓN

y LA INSPIRACIÓN.

 

Una ORACIÓN: 

Gracias, Dios

¡Qué gran idea

se te ocurrió!

 

LO MÁS IMPORTANTE ES UNA MUJER

y tengo unas cuantas razones más para demostrarlo:

Mi abuela en la cercanía de su despedida, mi madre, ahora pensando en si tendré hambre, mi hermana, apoyo y cómplice, la madre de mis hijos, sin duda una mujer admirable, mis primas, la dulzura, mi cuñada, otra hermana, mis sobrinas, ternuritas y si parece que se me acaba la lista, es solo porque LA MEMORIA que también es una mujer, se olvida de muchas de las cosas importantes que debe recordarme, pero pese a eso, también a ella la quiero.